martes, 29 de marzo de 2011

Devoción

Frente a mi ventana se vienen las palabras
Como el agua que cae de la lluvia
Fuerte a ello, sin ambulo alguno
No veo más que la niebla que
Cubre vuestros cielos
Vuestra tristeza penetra el cristal
A través de espinas, de rosales que
Que impregnan ahí en mi ropa, y venas
Hacinado herida profundas
Mientras leve mente cae la sangre
Fría, cruda, cruel, déspota e infame
Negro el color, y la espina
Clava directo o en mi corazón
Mientras el roció, del pétalo se sucumbe entre
Mis manos, casi arrodillado, no es mas que un
Suspiro, un casi suspiros se levanta
De mis labios
Como aquel viento, aquel recuerdo de angustia
Lo asemejo , al pasado a espejos rotos ..
Y del hieros profesos, mas la angustia
El dolor , pecaminosa y estremecedor
Junto a palabras fúnebres
Que en su quinta esencia no mezclan más
Que la locura y la pasión del propio
Verso, mientras se puede escuchar
El eco , al caer las gotas de sangre ..
Al suelo, suavemente, se escuchan
Espero ahí acomodarme en un leve sueño
Para no caer al imframundo , me pregunto ..
En aquella devoción del propio sueño
Mientras mis ojos sean cerrados ..
Dormiré profundamente ..
Si crujido alguno, que sea
Mas estremecedor que la misma muerte ..


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